Un día como hoy
Suena el despertador (con un sonido un poco molesto), el tic-tac estuvo sonando
incontables veces en mis sueños... suena un poco desagradable. Pero en fin, son recién las 6 de la mañana.
Pongo play en mi cabeza y casi de memoria empiezo a dar a luz al combo de todos los días, la radio esta vez me dice que tengo que odiar a los piqueteros y sentir pena por el tipo que no pudo llegar a horario a su trabajo. Sin embargo siento pena por el hecho de haber llegado a ésto (como si fuese hermoso cortar una calle con 40 grados de bronca), y siento odio por todos los que lo hicieron posible; por los que fueron vendiendo el país de a poco casi sin darnos cuenta (tanto que volvimos a pedir otra canción más luego de haber terminado el primer show)… pero éstas cosas no las aprendo diariamente en la radio… ¿en la televisión?... de los diarios no hace faltar hablar…
Luego salgo de mi casa agobiado por las realidades transformadas que me dicta el Cuarto Poder, saliendo a la defensiva de “negros”, “pobres” y “locos” pensando que son los enemigos de la sociedad, creyendo también que
Una profesía parece haber surgido de la cabeza de Orwell allá por 1984, luego de leer un idioma que no es el mío… es un poco mas nefasto, algo así como: “olaa, kcs? tb? Sho re felizz i contenta de vert… no t kreaz q me olvide, mi hrno nunk me pasa tus msj, bueno salud2 tkkk!!”
El mayor temor es que nadie nos obligó directamente a humillarnos así, como en la novela, si no que el facilismo lo puede todo, lo que cueste menor esfuerzo y/o tiempo sea bienvenido estos tiempos. (Otro ingrediente más en esta ensalada de humanos).
El Estado no trabaja solo, cuenta con el arma de manipulación más grande que existe y es el que se ejerce sobre las mentes. La mente, lo que hace al hombre pensar, eso es lo que quieren frenar teniéndome horas frente al televisor enterándome con quien estuvo Susana Jiménez mientras noviaba con el Corcho Rodríguez, y quitándome tiempo para descansar el balero, mirar a la nada, leer un libro, amar, sentir… pensar.
Todos caminamos hacia el precipicio, queriendo ser felices… queriendo ganar plata, laburando hasta el cansancio mental, progresando, facilitando tareas, comprando permanentemente los inventos televisivos, en el tiempo libre nos mentimos un rato leyendo el diario, mirando el noticiero, odiando a los negros, a los faloperos, a los condenados por vaya uno a saber porqué. Eso es lo que compramos diariamente, día tras día, segundo tras segundo, confiando en lo que nos dicen, limitados, engañados, encerrados por los medios, el estado, la policia corrupta, las obligaciones, los horarios, las corridas… en fin, el estrés, el mejor aliado de nuestros enemigos, el mejor aliado de los que quieren poner un freno a nuestras mentes…
No hay comentarios.:
Publicar un comentario